lunedì 19 marzo 2012

es it - Culmine y el primitivismo – Saludos de Culmine al último número de RyA


Culmine y el primitivismo

En el 2011, saludando la redacción de Rabia y Acción (que en aquel entonces aún no había expresado posiciones a favor de cierto racionalismo), nosotrxs de Culmine, citando el pensamiento del Punky Mauri, expresamos nuestras posiciones relativas al rechazo de todas las formas de dominación y sobre la deseable extinción de la especie humana. En ese saludo nos definimos como anarquistas, individualistas, veganxs y primitivistas. Sobre nuestros anarquismo, individualismo y veganismo no tenemos nada más que añadir; mientras en relación con nuestro primitivismo advertimos la necesidad de delinear algunos aspectos que nos pertenecen.

El hecho de definirnos primitivistas a nosotrxs mismxs en el texto en cuestión (que ahora publicamos en su totalidad) legitimaba por un lado la crítica radical hacia la civilización, por el otro la necesidad de recordar que esta crítica pierde su sentido sin un análisis previo del problema de la “explosión demográfica” y, en consecuencia , “la extinción de la especie humana” (es un hecho que la presión demográfica de los seres humanos se ha vuelto insostenible desde la revolución industrial). Actualmente tendríamos la misma posición, si bien somos ferozmente contrarixs a los desvíos, académicos y no sólo, debidos al abuso del concepto de primitivismo muy a menudo vendido como un retorno trivial y simplista a una vida de caza y recolección. Estas desviaciones se revelan en los mitos y estereotipos tales como: “arco y flecha”, “armonía con la naturaleza”, “relación de empatía con los animales”, “ausencia de jerarquías”, “sacralidad de la vida otorgada por la Madre Naturaleza”, “tribus salvajes”,”edulcoración de la suferencia y de la muerte de los seres vivos.” En este sentido, nos compartimos los conceptos de delirium tremens cuando escribe:

a) lo que sucedió hace miles de años nadie puede probarlo (¿tal vez no sean el resultado de un STI esos métodos “científicos” que presuntamente nos dicen con certeza cuanto era bello o malo el mundo ekis tiempo atrás?).

b) El concepto de armonía con la naturaleza es culturalmente un invento. No sólo cada cultura desarrolla su propia idea de naturaleza, sino que la armonía con ella es percibida como tal por aquellxs que viven a menudo de una manera totalmente opuesta (¡cuál armonía con la naturaleza, por ejemplo en la selva tropical, puede vivir un ser humano nacido y crecido hoy en día en la ciudad?).

Creemos que cada individux tiene su propio imaginario de “naturaleza” y / o “salvaje” y que esto sea uno de los estímulos que tendrían que persuadirlo a actuar en contra de lo existente. En cualquier caso, siguen siendo válidas la preguntas contenidas en nuestro saludo a Rabia y Acción; ¡qué estimulen pensamientos explosivos e incendiarios!

per l’Anarchia!

Culmine

marzo 2012

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Saludos de Culmine al ultimo numero de Rabia y Acción

“Para mi la raza humana debería ser aniquilada,

en realidad inclusive nosotros,

dado que considero que es el ser humano

el mayor enemigo de la naturaleza.

Como agente destructor es el más nocivo

para el planeta y por lo mismo merecemos

nuestro propio exterminio”.

Mauricio Morales

Nos ahorramos la lectura de las premisas triviales en torno a todo lo que el actual sistema de dominación continúa haciendo creer al ser humano de que es el centro de los seres vivos y, por eso, está legitimado a utilizar cualquier recurso tecnológico que justifique su fin.

Nos ahorramos, además, el resumen simplista de las distintos períodos históricos y/o prehistóricos (aunque teóricamente estimulantes) en que el ser humano parece haber sido libre de toda forma de dominación (nos parece irrelevante frente a la explosión demográfica evidente y continua).

Culmine, de hecho, siempre compartió las palabras del Punky Mauri, mismas que quisimos citar para dar comienzo a este breve texto. La extinción del género humano sería, en nuestra opinión, unas de las posibles conclusiones de un ecologismo radical, teniendo en cuenta la actual insostenibilidad demográfica en el planeta

Al mismo tiempo, compartimos opinión con aquellos que se niegan a considerar a la naturaleza o a la Tierra como madre y al resto de los seres no humanos como hermanos y hermanas, repudiando así al sistema jerárquico representado por la familia, al igual que todas las instituciones sociales que reafirman, una vez más, los mecanismos de dominación.

Como anarquistas e individualistas estamos convencidos que se tendrá que empezar por la destrucción de conceptos (y prácticas) de “colectivismo”, “masa”, “pueblo”, “sociedad” que, a su vez, crea las categorías de “oprimidos”, “extranjeros, “privilegiados“, “desviados”, etc.

Es el individuo, quien –estableciendo relaciones libres y a su antojo con otros individuos– tiene que poner en práctica su instinto de liberación; liberación, en primer lugar, de los estereotipos que intentan encerrarnos en una casilla predeterminada como “miembros de la sociedad” sin la menor autonomía.

Mientras continuemos utilizando los recursos que esta “sociedad” nos propone o que, más bien, nos brinda como necesarios, no seremos libres sino que seguiremos atrapados en los términos de una mediación continua. Si deseamos rechazar también esta mediación, entonces, no nos queda otra opción que la destrucción: en primer lugar, la destrucción de las ciudades y de todo lo que ellas implican, en particular, a todo lo relacionado con la tecnología y la economía.

Pero, a este nivel de discusión, surgen varias preguntas espontaneas:

¿estamos realmente seguros de llegar a vivir fuera de la urbanización y, aún más, abandonando la ciudad vamos a tener necesariamente ante nosotros algo menos alienante (la domesticación de la Tierra y de los animales)? ¿Intentaremos alguna vez renunciar en serio a la tecnología (¿mataríamos animales para cubrirnos?)? ¿Podremos prescindir de cualquier medio de transporte (ya sean tecnológicos, desde nuestra perspectiva anti-civilización o, usando animales, desde nuestra posición como animalistas, veganos y anti-especistas)? ¿Cuál sería el lugar destinado para las computadoras e Internet?

Como veganxs y primitivistas creemos tanto en la liberación de la Tierra como en la de los animales, sin embargo, nunca nos permitiríamos, por ejemplo, obstaculizar en el proceso de depredación natural (animal y vegetal) ni proteger del dolor, del sufrimiento o de la muerte a seres considerados vulnerables, esto significaría secundar (aun involuntariamente) la idea antropocéntrica que identifica al ser humano como salvador/protector/libertador. La liberación de la Tierra y de los animales es deseable cuando implica la destrucción de las jaulas y de los instrumentos de tortura y de dominación del ser humano sobre toda la naturaleza.

De hecho, no podemos sentirnos condenados a la inmovilidad aún estando conscientes de algunas contradicciones inevitables; lo que hemos argumentado arriba no es una invitación a realizar una pausa de reflexión sino un llamado a acelerar el proceso de aniquilación de todo lo existente.

¡Viva la naturaleza salvaje!

¡Viva la Anarquía!

Culmine

http://culmine.noblogs.org/2012/03/19/culmine-y-el-primitivismo-saludos-de-culmine-al-ultimo-numero-de-rya/#more-14732


Culmine e il primitivismo – Saluto di Culmine all’ultimo numero di RyA

Culmine e il primitivismo

Nel 2011, salutando la redazione di Rabia y Acción (che all’epoca non ancora esplicitava posizioni a favore di certo razionalismo), noi di Culmine avevamo espresso, citando il pensiero del Punky Mauri, le nostre posizioni relative al rifiuto di ogni forma di dominazione e all’auspicabile estinzione del genere umano autodefinendoci anarchici, individualisti, vegani e primitivisti. Sui nostri anarchismo, individualismo e veganismo non abbiamo altro da aggiungere; in relazione al nostro primitivismo avvertiamo invece la necessità di delineare alcuni aspetti che ci appartengono.

Il definirci primitivisti nello scritto in questione (che riportiamo integralmente) legittimava da un lato la critica radicale alla civilizzazione, dall’altro la necessità di ricordare che tale critica perde di senso senza un’analisi previa del problema “esplosione demografica” e, di conseguenza, “estinzione della specie umana” (è un dato di fatto che la pressione demografica degli esseri umani sia divenuta insostenibile a partire dalla rivoluzione industriale). Attualmente sosterremmo la stessa cosa pur essendo ferocemente contrari alle derive, accademiche e non solo, conseguenti all’abuso di tale concetto troppo spesso venduto come un banale e semplicistico ritorno ad una vita di caccia e raccolta. Queste deviazioni si palesano in miti e stereotipi del tipo: “arco e freccia”, “armonia con la natura”, “rapporto empatico con gli animali”, “assenza di gerarchie”, “sacralità della vita concessa da madre natura”, “tribù selvagge”, “edulcorazione della sofferenza e della morte del vivente”. In tal senso, sottoscriviamo i concetti di delirium tremens quando scrive:

a) ciò che è avvenuto migliaia di anni fa non ce lo può dimostrare nessuno (non sono forse frutto di un STI quei metodi “scientifici” che pretendono di dirci con certezza quanto sia stato bello o brutto il mondo tot tempo fa?).

b) Il concetto di armonia con la natura è culturalmente inventato. Non solo ogni cultura sviluppa una propria idea di natura ma l’armonia con essa è percepita come tale da chi, spesso, vive in maniera totalmente opposta (quale armonia con la natura, per esempio nella foresta tropicale, può vivere un essere umano nato e cresciuto oggigiorno in città?).

Siamo convinti che ogni individuo abbia il proprio immaginario di “natura” e/o di “selvaggio” e che sia questo uno dei motori che dovrebbe indurlo ad agire contro l’esistente. Ad ogni modo rimangono validi i nostri interrogativi contenuti nel saluto a Rabia y Acción; che possano sollecitare esplosive ed incendiarie riflessioni!

per l’Anarchia

Culmine

marzo 2012

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Saluti di Culmine all’ultimo numero di Rabia y Acción

“Per me il genere umano dovrebbe essere annientato,

in realtà anche noi,

visto che considero che è l’essere umano

il maggior nemico della natura.

Come agente distruttore egli è il più nocivo

per il pianeta e per questo ci meritiamo

il nostro stesso sterminio”.

Mauricio Morales

Risparmiamo la lettura delle banali premesse su tutto quel che l’attuale sistema di dominazione continua a far credere all’essere umano (ad esempio, che è al centro degli esseri viventi) e che, per questo, è legittimato a utilizzare qualsiasi risorsa tecnologica che giustifichi il suo fine.

Risparmiamo, inoltre, un semplicistico riassunto dei diversi periodi storici e/o preistorici (anche se teoricamente stimolanti) in cui l’essere umano sembra sia stato libero da qualsiasi forma di dominazione (ci parte irrilevante dinanzi alla evidente e continua esplosione demografica).

Culmine, di fatto, ha da sempre condiviso le parole del Punky Mauri, le stesse che abbiamo citato all’inizio di questo breve testo. L’estinzione del genere umano sarebbe, a nostro avviso, una delle possibili conclusioni di un ecologismo radicale, prendendo in considerazione l’attuale insostenibilità demografica nel pianeta.

Allo stesso tempo, condividiamo l’opinione di quelli che si rifiutano di considerare la natura o la Terra come madre ed il resto degli esseri non umani come fratelli e sorelle, ripudiando così il sistema gerarchico rappresentato dalla famiglia, e tutte le istituzioni sociali che riaffermano, ancora una volta, il meccanismo di dominazione.

Come anarchici e individualisti siamo convinti che si dovrà iniziare dalla distruzione di concetti (e pratiche) di “collettivismo”, “massa”, “popolo”, “società” che a loro volta creano categorie di “oppressi”, “stranieri”, “privilegiati”, deviati”, ecc.

E’ l’individuo che -stabilendo relazioni libere ed a suo piacimento con altri individui- deve porre in pratica il suo istinto di liberazione; liberazione, in primo luogo, dagli stereotipi che cercano di rinchiuderci in una casella predeterminata quali “membri della società” senza la più piccola autonomia.

Fino a che continueremo ad utilizzare le risorse che questa “società” ci propone o che, piuttosto, ci offre come necessarie, non saremo liberi e piuttosto continueremo a stare aggrappati ai limiti di una continua mediazione. Se vogliamo rifiutare anche questa mediazione, allora non ci resta altra opzione che la distruzione: in primo luogo la distruzione delle città e tutto quel che esse implicano, specie tutto quel che è collegato con la tecnologia e l’economia.

Ma, a questo livello della discussione, sorgono diverse domande spontanee: siamo veramente sicuri di riuscire a vivere fuori dall’urbanizzazione e, ancor più, abbandonando la città avremo dinanzi a noi qualcosa di meno alienante (la domesticazione della Terra e degli animali)? Riusciremo un giorno a rinunciare seriamente alla tecnologia (uccideremo animali per coprirci?)? Potremo prescindere da qualsiasi mezzo di trasporto (sia tecnologici, secondo la nostra prospettiva anticivilizzazione, o usando animali, dalla nostra posizione come animalisti, vegani ed antispecisti)? Quale sarebbe il posto destinato ai computer e ad Internet?

Come vegani e primitivisti crediamo sia nella liberazione della Terra che in quella degli animali. Tuttavia non ci permetteremo mai, per esempio, di ostacolare il processo della predazione naturale (animale o vegetale), né di proteggere dal dolore, dalla sofferenza o dalla morte degli esseri considerati vulnerabili; ciò significherebbe assecondare (seppur in maniera involontaria) l’idea antropocentrica che identifica l’essere umano quale salvatore/protettore/liberatore. La liberazione della Terra e degli animali è auspicabile quando implica la distruzione delle gabbie e degli strumenti di tortura e di dominazione dell’essere umano su tutta la natura.

Di fatto, non possiamo sentirci condannati all’immobilità pur essendo consci di alcune inevitabili contraddizioni; quel che abbiamo esposto non è un invito a fare una pausa di riflessione, ma un appello ad accelerare il processo di annientamento di tutto l’esistente.

Viva la natura selvaggia!

Viva l’Anarchia!

Culmine, 2011

http://culmine.noblogs.org/2012/03/19/culmine-e-il-primitivismo-saluto-di-culmine-allultimo-numero-di-rya/#more-14722

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