Invitacion hacia la autoeducaciòn (Chile)

Las demandas del movimiento estudiantil se han hecho carne en la mayoría de los habitantes de la región chilena, sumando con su irrefutable ímpetu a miles de hombre y mujeres de norte a sur y de cordillera a mar, cautivando a muchos de los indiferentes de siempre, atrayendo a políticos oportunistas y alarmando al gobierno de turno. Educación gratuita y de calidad para todos y todas. De ahí para abajo van las propuestas y exigencias de los estudiantes y profesores, de secundarios y universitarios. Todos, como se sabe, han puesto su fe en el Estado como canal y garante de estas demandas. El estado tiene la la plata y la infraestructura de control necesaria para imponer la gratuidad de la educación. He aquí el problema decimos nosotros. He aquí la manifestación una vez más, de la vieja costumbre de delegar en otros lo que debiéramos, en primer lugar, conquistar por cuenta propia.

Como anarquistas, constructores voluntarios y autónomos de nuestras vidas, amantes de la libertad y enemigos de toda autoridad, desconfiamos del Estado como guardia monopólico de la difusión de los diversos saberes. Del mismo modo consideramos que las relaciones monetarias deben ser expulsadas para siempre de este terreno, y de todos. ¿Pedimos mucho y no estamos en armonía con el estado-fanatismo de las masas? Vale.

Sin duda ha sido saludable en muchos de los sentidos la existencia de las manifestaciones estudiantiles del último tiempo, sobre todo porque cada una de sus acciones expresa la necesidad de sus interesados por ser ellos mismos, y no los políticos profesionales, los canalizadores de sus interés. Pero faltaríamos a la sinceridad con nuestros principios si dejáramos que el entusiasmo del momento callara nuestras criticas y la voluntad de manifestar nuestras propuestas.

A nuestro juicio, la educación, o más bien la búsqueda y el intercambio de los diversos saberes, no debe poseer valor comercial, tampoco puede ser privilegio de unos pocos, menos aún configurarse como una obligación impuesta a la fuerza.

Si la enseñanza en las escuelas y liceos es obligatoria es porque aquella ha sido moldeada para entregar valores y conocimientos afines al Estada y al mercado. Los liceos son fábricas de trabajadores y las universidades de funcionarios. Todo el sistema educacional no se creado para elevar el nivel cultural de sus estudiantes. Las escuelas y universidades, fiscales y privadas, no se han fundado para que la juventud disfrute -por disfrutar simplemente- de los diversos saberes que la humanidad ha acumulado durante miles de años. Todo el sistema educacional ha sido creado para disciplinar a sus educados en los valores del Estado y del mercado, esto es, para crear ciudadanos sumisos con la autoridad de la Ley y el dinero.

Los presidentes, las guerras, las dictaduras, las crisis económicas, el tiempo, todo pasa y las escuelas y universidades siguen allí mismo. Y siguen porque no constituyen amenazas para desestabilizar a ningún gobierno. El Estado y el mercado las fomentan porque les son útiles para controlar a la población que habita en el territorio que artificialmente se arrogaron. Y es que, a pesar del intento de miles de profesores progresistas (carceleros de cuño bondadoso), o de las reformas y democratizaciones de liceos y universidades, el sistema educacional no está hecho para que los estudiantes disfruten de lo que allí se puede obtener en cuanto a conocimientos, sino para ser moldeados para servir a otros y someterse a las leyes. He allí la educación de la sumisión.

La educación debe ser voluntaria y no debe recluirse exclusivamente en las escuelas y universidades, debe ser a nuestro ritmo y conforme a nuestros intereses individuales, libremente escogidos. Cada cual, de forma individual, o con sus afines, debe entender que no hace falta esperar a otros, o de otros, para comenzar la búsqueda de los saberes que le inquietan. Asì entendemos la educación, o mejor dicho, la autoeducación.

Esta pequeña invitación, precaria si se quiere, y a-temporal por supuesto, ya está hecha. La pizarra está en blanco, llènela con todo lo que usted imagine y quiera, ante la renuncia a las formas pre-hechas, las posibilidades son infinitas. ¿Qué no somos prácticos?¿Y qué más concreto que buscar el control de nuestras vidas?


Los "educadores constituyen el azote de la esfera intelectual...
(Oscar Wilde)

Extraido del boletin del Periodico Anarquista "EL SURCO" - el panfleto completo AQUI

http://srhostil.org/elsurco/

http://srhostil.org/elsurco/separata2.pdf